Cuando para algunos esto de depositar los plásticos en el contenedor amarillo, el papel en el azul y el vidrio en el verde, es el límite de lo que consideramos reciclaje, ya hace años que se ha dado un paso más con lo que se llama el compostaje. Este proceso, que transforma la materia orgánica para obtener un abono natural, se puede llevar a cabo en cualquier casa mediante un compostador y permite que de cada 100 kilos de basura orgánica se obtengan 30 de compost que puede ser retornada a la tierra en forma de humus para las plantas. Hoy hablamos con el fundador de una empresa que se dedica a ello.
“La ecología es compatible con hacer negocios. Ganan las empresas, ganan los ciudadanos y también las administraciones públicas. La Eco eficiencia (económica y ecológica) es sinónimo de inteligencia, de sentido común vaya! Y las ventajas no son pocas”
La entrada de los nuevos inversores ha sido una gran noticia
Bueno, sencillamente ha fructificado el trabajo de mucho tiempo. No ha sido nada fácil “casar” los intereses y visiones de empresas y personas tan diversas, pero ahora que ya somos un equipo, nos complementamos muy bien en temas como la fabricación, la distribución o la gestión de proyectos y personas por ejemplo.
¿Y no le da un poco de pena dejar de ser el director general de una compañía que creó hace casi diez años?
No, yo no dejo la compañía, pero aporto más valor en otras áreas que no son la gestión y con la entrada de los nuevos socios como Silvio Elias de Veritas, Josep Mª Tarragó de Ficosa, Cristian Rovira del Grupo Sifu y Caixa Capital Risc nos va a permitir sencillamente poner al frente del día a día a gente que sabe cómo hacer funcionar una empresa. Así que vamos a crecer en plantilla, a mejorar procesos, y a exportar.
Pero con usted al frente, las cosas no han ido nada mal…
Si, pero la etapa de nacimiento, y del primer crecimiento creo que acabaron cuando tomé la decisión de dejar de importar compostadores y empezamos a fabricarlos nosotros mismos.
¿Y aquello de que la clave es comprar y vender, nunca fabricar…?
En nuestro caso, eso no ha sido así. Los compostadores que hay en el mercado mundial no reunían las características que los clientes nos pedían, como que fuera modular y ampliable tipo “lego” o personalizable en acabados y colores. Nuestra patente además, consiste en hacer los Combox con la reutilización de plástico mix…
¿Plástico mix?
Sí, aquel plástico que depositamos en los contenedores amarillos que no es el típico envase, sino objetos de plásticos varios como juguetes, esponjas, o zapatillas. Eso, en la planta de separación de residuos constituye un 17% de lo que se tira. Así que nosotros nos los llevamos y con eso que nadie quiere hacemos los Combox.
Y les sale más barato que comprar los compostadores
Sí, es más barato, pero sobretodo es estratégico y coherente con nuestra filosofía. se evita que acaben en vertedero o en una incineradora, y también en las correspondientes emisiones de carbono, claro. En definitiva, todos ganamos.
Eliminan, pues, un problema y de él hacen un negocio…
No podemos olvidar que la administración tiene un problema con esas toneladas de residuos que no se han podido seleccionar en la planta de separación porque ninguna empresa lo quiere. Así que con ello, ahorramos dinero y emisiones al país. Tenga en cuenta de que aquí generamos 1,5 kg de basura por persona y día, y la mayoría es materia orgánica.
O sea que a las empresas y a los Ayuntamientos les va a salir a cuenta el compostaje
Tiene muchas ventajas, además del concepto ecológico que conlleva. Antes, se trabajaba con la idea de que la Generalitat pagase el 75 % y el Ayuntamiento el 25% restante de la instalación de compostadores. Ahora, con los cambios, se ha decidido un método mejor, y es el de retornar a los municipios el canon de deposición con 20 euros al año por cada compostador que se incentiven que se pongan en las casas. Piense que un recipiente como el nuestro tiene una vida de 30 años, y sale por unos 50 euros, así que en un par de años y medio se ha pagado, y además se seguirá cobrando el retorno del canon muchos más años claro.
Y creo que las empresas se han decidido por la utilización de compostadores como reclamo publicitario, además
Sí, se me ocurrió una noche, a las tres de la madrugada y me puse a trabajar enseguida en la idea de utilizar los Combox para configurar con ellos el nombre corporativo de una compañía, de manera que pueda verse desde el aire. Para que cuando uno entre en el Google Maps, pueda identificar el nombre de la empresa.
¿Algunas empresas que hayan aplicado ya esta idea?
Pues ya hemos instalado en empresas como Cobega (la Coca-Cola, para entendernos) Endesa o Danone, y tenemos en cartera unas cuantas más: desde el Museo del Agua de Agbar en Cornellà a Bodegas Torres, Celsa, NH, Acciona
Y no debe salir muy caro…
Depende de las instalaciones, desde 50 € hasta 50.000 € el más grande que hemos hecho. Los ahorros son claros con lo que ahorras en abonos, en gestión externa de residuos, en agua de riego, en bolsas, en desplazamientos….Tu compostaje acaba siendo finalmente el abono que reutilizas, y así, una y otra vez.
A pesar de este éxito, ustedes habrán notado más la crisis por el hecho de que muchos de sus clientes forman parte de la Administración Pública
Bueno, se notó la caída en 2010, y a nosotros, sí, nos pasó factura. Pero en 2011 las cosas han cambiado, sobre todo con la consecución de varios concursos, en el País Vasco o en Canarias, en los que hemos colocado 8.000 compostadores. Y ahora se está viendo que el cambio de paradigma en el tema ecológico empieza a dar sus resultados.
¿A qué se refiere?
Pues a la idea que finalmente se está diluyendo la idea de la demonización que sufre el mundo empresarial en cuanto a su trato con el medio ambiente. Por definición, hasta hace poco una empresa, sea cual sea, es mala, contamina, no respeta el entorno, y esto no es cierto.
Habrá ayudado cierta concienciación real
Sí, creo que la visión de los actuales rectores políticos ha cambiado. Artur Mas, por ejemplo, lo dijo en una de sus comparecencias: “Creo en la ecología del hacer, en la ecología de lunes a viernes, no sólo la de los fines de semana”. Ahora hay una nueva hornada de políticos que están interconectados con otros países y también las redes sociales ayudan mucho. Nadie quiere hacer las coses mal y exponerse a que lo sepa todo el mundo.
Y no debe ser esto incompatible con hacer negocio
Eso es lo que hacemos. Todos los informes que llevamos elaborando hace años para la Administración podemos utilizarlos para que las empresas obtengan un beneficio, ya no solo el de dejar de pagar por recoger, transportar y tratar los residuos, o reducir la llamada “huella de Carbono”. También les sirve para que puedan mejorar certificados ISO, y muchas otras ventajas con sus stakeholders.
¿Hay más canales o mercados que puedan crecer en todo este mundo del compostaje?
Si seguimos la evolución de algunos países, lo que se está poniendo de moda son los llamados huertos urbanos. Y es que en el fondo, es una manera en la que podemos utilizar esa basura que ahora depositamos en el contenedor para que podamos reutilizarla para nuestras plantas o vegetales… y sí, le aseguro que eso va a ir a más y nosotros tenemos el Combox, que es compostador + huerto urbano, todo en uno para cerrar el ciclo de la naturaleza.
Quizá hay países en los que la cultura de la prevención y del reciclaje cueste más de implantar. Los Estados Unidos, por ejemplo.
Pues con la de basura que se genera allí, imagínese. Es cierto, todo este esfuerzo que hemos hecho es, entre otras cosas, para eso, para salir y aliarse en una joint venture con un socio americano y sembrar Estados Unidos de nuestros Combox.
¿Costará?
Mire, yo creo que hay que empezar a cambiar algunas cosas. Por ejemplo dejar de hacer las cosas solos. Debemos juntarnos y co-crear productos y servicios con otras organizaciones de todo tipo. Sumar esfuerzos para multiplicar resultados. Esto lo estamos haciendo desde una nueva organización empresarial multisectorial donde el vector ambiental nos une. Pronto se oirá mucho más, pero os avanzo que nos llamamos Ecoemprenedors.cat